Uno de los grandes avances en la audiología en los últimos años ha sido la conectividad entre los audífonos y otros dispositivos auxiliares que mejoren la calidad de la señal sonora.
Hoy en día, esto se consigue mediante una conexión Bluetooth, la cual permite que dos o más dispositivos transfieran datos de forma inalámbrica entre si. Así por ejemplo, el uso de esta tecnología entre los audífonos y el teléfono móvil, permite que la amplificación de la señal sonora venga determinada por la audiometría del paciente, con lo que el resultado final es una audición más fina de la conversación y, por tanto un mejor entendimiento del mensaje.Además, al usar Bluetooth también habrá menos problemas de interferencias o ruidos molestos del entorno ya que se trata de una conexión directa entre los audífonos y la fuente sonora.
Este proceso puede realizarse con una gran variedad de aparatos que todos usamos en nuestro día a día como pueden ser tablets, televisores, manos libres, sistemas de FM …etc
En algunos casos, dependiendo del modelo de los audífonos, será necesario que el paciente use un pequeño accesorio para convertir la señal Bluetooth en una señal inalámbrica que el audífono pueda trabajar. Un buen ejemplo de ello sería el micrófono sonoro, que te permitirá entender conversaciones con mayor claridad pese a estar en situaciones muy ruidosas, como un restaurante, e incluso solventar el problema de la distancia a la fuente sonora como por ejemplo en una sala de conferencias grandes.