El 96% de las personas que utilizan audífonos lo hacen en la mayor parte del día y diariamente. Lo más probable es que los profesionales de la audición recomienden a los nuevos usuarios utilizar estos dispositivos en periodos cortos para ir adaptándose, y una vez superado ese periodo, le recomienden utilizarlos durante la mayor parte del día. Es por ese motivo que muchos pacientes se preguntan si se puede dormir con ellos.
Al igual que sabemos que es necesario llevar los audífonos durante el día, también es importante que sepamos que hay que dar un descanso a los oídos y al cerebro.
RAZONES PARA DORMIR SIN AUDÍFONOS
Incomodidad:
Hay audífonos de todas las formas y tamaños, pero incluso los modelos más pequeños e invisibles siguen siendo un elemento externo en los oídos.
Si se duerme de lado, podemos sufrir molestias por la presión que ejerce el oído sobre la almohada o el colchón, y el caso de los audífonos retroauriculares , acostarse boca arriba puede tener un efecto similar.
Retroalimentación:
Los audífonos utilizan micrófonos para captar y transmitir los sonidos no audibles y, en algunos casos, hay dispositivos que tienen más de uno. La posición de estos micrófonos es muy importante para garantizar una solución eficaz y fiable para la pérdida auditiva.
Debido al roce de las sabanas o almohadas, los micrófonos pueden ser más sensibles a emitir pitidos agudos u otras formas de retroalimentación.
Mejor sueño nocturno:
Una mala noche de sueño es perjudicial para la salud, el bienestar y el estado anímico. Quitando los audífonos reduciremos la cantidad de estímulos sonoros que recibimos mientras dormimos, dando descanso a nuestro cerebro.
Transpirabilidad:
Todos los oídos acumulan cera, especialmente cuando la transpirabilidad es limitada. No quitarse los audífonos por la noche provocará una mayor acumulación de humedad y cera.
El resultado suele ser un problema grave pues un canal auditivo obstruido por exceso de cerumen puede limitar la audición con o sin audífono.
Al igual que los canales auditivos necesitan airearse, los audífonos también necesitan tiempo para secarse después de haber estado en los oídos todo el tiempo. Por ello, lo más recomendable es que cuando el usuario se quite el audífono para ir a dormir, los audífonos queden guardados en su estuche, o en el caso de los audífonos recargables en el puerto de carga.
La mayoría de los estuches o cargadores llevan incorporados un sistema de secado, de no ser así, existen pastillas antihumedad o estaciones de secado que faciliten dicho proceso.